Por estas fechas, hace un año, aun no era consciente de lo que iba a
vivir durante el curso 2014/2015, y es que hace un año, aun no sabía que iba a
cumplir mi sueño, ser profesora después de tanto tiempo luchando por ello.
En el mes de Julio, el colegio San José, me dio la oportunidad de
alcanzar mi meta, ser profesora (eternamente agradecida), pero no de cualquier
cosa, sería profesora ni más ni menos, que de matemáticas.
El verano pasó rápido y el día 15 de septiembre llegaría en un abrir y
cerrar de ojos. Dos 4º de E.S.O eran mi “misión” para ese nuevo curso que
arrancábamos, dos cursos muy diferentes, cada uno con sus peculiaridades, pero
que se fueron ganando poco a poco a “la maestra”.
4ºC, una clase donde no se conoce que es el ruido, y no es para nada
irónico, es que son las personas menos ruidosas de todo el colegio… pero lo que
si que conocen es la constancia, la perseverancia, el progresar y superarse día
tras día, el no rendirse y el trabajar duro para conseguir la meta deseada. Me
han hecho sentir a gusto, sintiéndome escuchada, teniendo paciencia conmigo,
cuando era yo la que me equivocaba al hacer un ejercicio en la pizarra o cuando
sumaba mal la nota de los exámenes y me tenían que venir pidiendo su “cero
veinticinco” de más.
4ºD, mi clase de niños, y cuando digo niños, es porque la señoritas,
éramos minorías (Gracias Paula, Miriam y Lorena por no hacerme sentir tan sola
jejeje). Ellos si que conocen el ruido, los nervios y los gritos, pero han
sabido ganarme con su arte. Mentes tecnológicas privilegiadas, donde he
encontrado a mis asesores informáticos personales. De ellos no puedo decir que
sean tan constante o perseverantes, pero si, que son capaces de plantearte un
problema matemático, una función o una ecuación bicuadrática casi sin haberla
visto previamente. Espero que podáis perdonarme mis días de enfado y de deciros
que sois unos niños chicos y gracias por alegrarme muchos de los días con
vuestro arte.
Este año, no solo habéis aprendido algo de mí, yo también he aprendido
mucho de vosotros. He aprendido a tener 25 alumnos delante, donde mi propósito
es que vayan lo mejor preparados posible para el futuro. He aprendido a que los
problemas, no solo hay que resolverlos por trigonometría, sino que con
paciencia y ayuda, todo se saca. Me han enseñado a enseñar, me han enseñado a
regañar, me han enseñado a no poder parar de reír cuando la situación lo requiriera.
Me han enseñado a ser una “seño” de verdad, y no de esas que enseñan en los
másteres de universidad.
Me quedo con muchas anécdotas (todas buenas, las malas, se acaban olvidando), me quedo con muchas caras de ilusión al ver la nota de un examen, me quedo con frases puntuales en momentos puntuales, que, quizás no os dais cuenta, pero te hacen valorar tu trabajo y verlo valorado.
Me quedo con muchas anécdotas (todas buenas, las malas, se acaban olvidando), me quedo con muchas caras de ilusión al ver la nota de un examen, me quedo con frases puntuales en momentos puntuales, que, quizás no os dais cuenta, pero te hacen valorar tu trabajo y verlo valorado.
Mi profesor de química me dijo una vez, tus primeros alumnos los
recordarás de por vida, y así será; os habéis quedado grabados en mi cabecita
entre ecuaciones, funciones y combinatoria.
Gracias Jose, Sigrun, Leo, Alba, Santi, Pili, Sergio C, Vicky, Claudia,
Julio, Adolfo, Indira, Pablo Gómez, Elvira, Fran, Tamara, Pablo Gutierrez,
Juan, Sergio L, Ali, Thalia, Luis, Gema, Paula, Dina, Karina, Gonzalo, Antonio,
Calos Cobos, Álvaro, Coto, Carlos Cuartero, Fede, Eze, Adri, Dani, Carlos
Lucas, Manzano, Alex Martínez, Muñoz, Ismael, Lorena, Paco, Paula, Miriam, Jesús
(perdonarme si me salto a alguien) por ser mis primeros alumnos y ayudarme a
despegar en mi carrera docente. GRACIAS.
No os olvidéis que aquí estoy para lo que necesitéis y que todo
consejo que me deis para mejorar en el futuro será bien recibido. Espero seguir sabiendo de
vosotros y que me contéis vuestro éxitos, que estoy segura, serán muchos.
Enhorabuena a todos y a disfrutar del verano, os lo merecéis.
Aquí se cierra una etapa en el blog, pero seguirá abierto para el
futuro y para que siga ayudando a todo aquel que necesite una ayudita.